17/08/2023

Imaginando el futuro de la arquitectura

La tecnología BIM y la Inteligencia Artificial pueden ayudar a los arquitectos a crear edificios más sustentables y eficientes. En la nota, algunas de las herramientas más utilizadas. Por Arq. Pablo Swiecicki, director de ESARQ, para la revista Gerencia Ambiental.

 

La innovación tecnológica ha traído grandes cambios en el diseño y la construcción de los espacios donde vivimos, trabajamos y estudiamos. Además, ha facilitado la tarea de los arquitectos permitiendo trabajar de forma más eficiente y sustentable. A continuación, algunas de las herramientas más utilizadas.

1.     Building Information Modeling (BIM)

BIM es un recurso que permite generar y gestionar datos de los edificios durante su ciclo de vida, valiéndose de un software dinámico y en tiempo real de modelado en 3D. Si bien las ventajas de esta tecnología son muchas, quizás la más importante es que nos ofrece una clarificación del estado actual/final del edificio, dando acceso a una mejor coordinación y detección de interferencias.

Así mismo, el sistema sirve para realizar un testeo preliminar del rendimiento ambiental de la obra, fundamental para certificar en L.E.E.D. (Leadership in Energy & Environmental Design).


2.Realidad aumentada

A diferencia de la realidad virtual, la realidad aumentada muestra elementos virtuales sobre objetos reales. Esto significa que además de recrear modelos en 3D, se puede utilizar para analizar el impacto de modificaciones en estructuras ya existentes.

Los procesos 3D, la realidad virtual y la realidad aumentada, son herramientas de gran ayuda para la toma de decisiones durante el proceso de construcción. Junto con los programas de gestión y gerenciamiento, el diseño arquitectónico 4.0 ayuda a terminar con un viejo problema del sector: cumplir con los plazos y costos previstos para cualquier tipo de obra. Además, son tecnologías más participativas y colaborativas. Por ejemplo, el cliente ahora puede ver exactamente cómo va a quedar su oficina o vivienda, y estar en el centro de las decisiones porque la tecnología se lo permite.

3. Drones aplicados a la construcción

Los drones están siendo utilizados para realizar mapeos y mediciones de edificios. Nos proporcionan imágenes de alta resolución que permiten a los arquitectos y constructores realizar inspecciones más rápidas y precisas. También sirven para el seguimiento del progreso de las obras.

4. Arquitectura robótica

La robótica se usa cada vez más en la construcción para reemplazar a personas en lugares de difícil acceso, pocos seguros, en tareas muy repetitivas y/o riesgosas. Es una herramienta más que ayuda a ser más eficientes en los tiempos y, sobre todo, mejorar la seguridad en el lugar de trabajo.

5. Inteligencia artificial

La arquitectura no es ajena al auge de la Inteligencia Artificial (IA) y sus novedades. La innovación tecnológica en el sector está ampliando los horizontes, dando lugar a nuevas prácticas y formas de diseñar, planificar y trabajar en todo tipo de proyectos. 

La fase conceptual y de anteproyecto implica generalmente que un profesional, o un equipo, trabaje muchas hora para generar distintas opciones y propuestas. En este sentido, bien utilizada, la IA nos permite acortar algunos tiempos en esta etapa, y expandir la creatividad con un abanico más amplio de ideas.

De hecho, los arquitectos utilizan algoritmos cada vez más complejos para generar espacios y geometrías antes inimaginables, aprovechando las inmensas posibilidades de herramientas de software, como el ya mencionado sistema BIM.

Fuera de la fase de diseño, también se está aplicando la IA en la evaluación de proyectos, ya que tiene el potencial de facilitar el trabajo del arquitecto analizando todos los datos y creando modelos sustentables, rentables y atractivos para el cliente.

Desafíos para la arquitectura 

A pesar de estos beneficios y su enorme potencial como herramienta, hay cosas que la IA no puede reemplazar.

Si bien las nuevas tecnologías son inspiradoras y nos permiten acortar algunos tiempos, la creatividad y capacidad de análisis el arquitecto, como por ejemplo, saber interpretar de las necesidades de un cliente, son imprescindibles.

El contexto de hoy exige buenas prácticas de arquitectura. Poner todas estas herramientas al servicio de la creación de entornos sostenibles y proyectos que focalicen en áreas clave de la salud humana y medioambiental, como: la calidad del aire, los materiales y recursos utilizados, la energía y atmósfera, la ubicación y el transporte, la elección de sitios sostenibles, la eficiencia en el agua, y la innovación, entre otros.

El desafío está en saber combinar el saber y la creatividad de diseño con la inteligencia artificial. Integrar el talento humano y la tecnología en un círculo virtuoso y fluido de trabajo, a fin de dar soluciones a los grandes desafíos que tenemos por delante. Entre ellos, proyectar y construir espacios más respetuosos con el medio ambiente, impulsando al mismo tiempo el desarrollo social y económico desde nuestra actividad.

 

Publicado en Revista Gerencia Ambiental.